El pasaje de Éxodo 6:1-13 es un momento crucial en la narrativa de la liberación de Israel. Aquí, Dios se dirige a Moisés con una promesa poderosa: (v. 1). Este versículo no solo establece la autoridad divina, sino que también subraya la en la historia. La afirmación de que el faraón dejará ir a los israelitas “solo por mi mano poderosa” resalta que la liberación no será resultado de la persuasión humana, sino de la .